Durante 30 años, Daniel Lambert dirigió un próspero negocio de vinos en el Reino Unido, pero el día de Año Nuevo de 2021 todo cambió.
La finalización del Brexit hizo que sus costos se dispararan, con requisitos comerciales que iniciaron una fuga de £ 150,000 al año en su empresa que orgullosamente «comenzó con cinco libras».
Ahora, Lambert, de 50 años, se mudó al sur de Francia para administrar su empresa con la esperanza de reducir los gastos burocráticos.
Daniel Lambert Wines importa alrededor de 1,8 millones de botellas de vino de Europa cada año y las suministra a los principales supermercados británicos Waitrose y Marks & Spencer.
Pero los compradores del Reino Unido ahora están pagando hasta £1,50 (€1,77) más por botella en comparación con antes del Brexit, dijo Lambert, y agregó que la pandemia de COVID-19 también influyó.
«Brexit está dañando fundamentalmente la economía del Reino Unido. No he visto ni un solo beneficio», dijo desde su nuevo hogar cerca de Montpellier.
Lambert espera que, al operar en Francia, reduzca el costo anual de importar al Reino Unido, que valoró en hasta 150 000 libras esterlinas (177 000 euros).
Seguirá dirigiendo su almacén en el sur de Gales, donde emplea a cinco personas.
«Este es un plan de ahorro de costos. No es algo que se me ocurrió de la noche a la mañana», dijo Lambert.
«Es la única forma de tener la ventaja competitiva que necesito. Ser capaz de comerciar en la UE de manera efectiva es mucho más fácil con una base en la UE».
«Estoy tratando de mitigar todos los costos de papeleo y solo tengo un costo de logística».
Lambert dijo que los costos de envío casi se habían duplicado desde antes del Brexit, pasando de £ 160 (€ 190) por palé a £ 288 (€ 345).
Pero dijo que el mayor gasto son los requisitos de papeleo provocados después de que el Reino Unido se retirara del Mercado Único Europeo.
Si bien el comercio de la UE se beneficia de la libre circulación de bienes, las importaciones a Gran Bretaña están sujetas a controles más estrictos que pueden incluir inspecciones físicas de los productos.
Lambert dijo que el papeleo se había disparado desde el Brexit con aparentemente 18 nuevos procesos para completar antes de importar bienes de la UE al Reino Unido.
Muchas empresas utilizan «corredores» con sede en Europa para comprender y gestionar los nuevos requisitos comerciales de la UE y el Reino Unido, pero esto implica cargos adicionales por sus servicios.
Lambert dijo que espera eludir estos costos gestionando el papeleo él mismo desde el nuevo centro de operaciones de su empresa en Francia.
Sin embargo, se ha enfrentado a una reacción violenta en las redes sociales después de compartir sus planes de abandonar «Brexitland».
Una mujer comentó: «Qué comentarios estúpidos de este hombre, realmente no necesitamos personas como él en nuestro país. Somos Gran Bretaña y seremos cada vez más grandes».
Lambert, que tiene doble nacionalidad franco-británica, dijo que estaba sorprendido por las críticas y agregó: «Creo que mucha gente necesita despertar.
«Mi doble nacionalidad significa que ahora tengo más derechos que alguien con solo un pasaporte británico».
Lambert, que vive con su esposa y dos hijos adolescentes, dijo que miles de expatriados se habían puesto en contacto con él y se habían mudado al continente por razones financieras.
Agregó: “La gente me dijo que se mudaron y no miraron hacia atrás. No quería hacer esto, honestamente creo que es una situación muy triste».
