Importantes voces en Miami marcan ruta para la libertad en Cuba

Con la participación de académicos, políticos, abogados y activistas, el evento destacó la urgencia del cambio democrático en Cuba, y los pasos a seguir para lograr ese deseo de millones de cubanos.

Carlos Sánchez Berzaín, director del IID, criticó la supervivencia del castrismo gracias al apoyo del entonces dictador venezolano Hugo Chávez, tras señalar un error en la percepción de Estados Unidos sobre el “fin natural” de la dictadura cubana.

Por su parte, José Azel, académico y miembro del IID, enfatizó la importancia de la educación y el buen ejemplo ciudadano para allanar el camino hacia un sistema democrático.

Puntos clave para la libertad

Marcel Felipe, abogado y presidente del Museo Americano de la Diáspora Cubana, presentó cinco puntos claves para apoyar al pueblo cubano, entre ellos la denuncia constante de la represión y la necesidad de brindar acceso a internet. Resaltó también la importancia de cortar el financiamiento del régimen instalado en La Habana.

Mientras tanto, el poeta Raudel Collazo Pedroso recordó los años de tortura bajo la dictadura y destacó la urgencia de apoyar a quienes luchan desde el interior de la Isla.

«Ha sido 64 años, tres meses y dos días de tortura«de asesinatos, crímenes, manipulación, adoctrinamiento y aplastamiento de un pueblo, depredador de la población cubana», enfatizó.

A su turno, el expreso político Jorge Luis García Pérez ‘Antúnez’, llamó a valorar y apoyar a los luchadores internosproponiendo un paro nacional como estrategia de resistencia.

«Tenemos que darle más importancia a quienes luchan desde dentro de las ‘entrañas del monstruo’, ellos son los que desde allí pueden liberar al país y nuestros esfuerzos deben ir dirigidos hacia ellos, por eso creo en la relevancia de un paro nacional», argumentó. .

«No existe una ‘varita mágica'»

Orlando Gutiérrez-Boronat, coordinador de la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), habló sobre la necesidad de comprender y apoyar el movimiento “orgánico y autónomo” que está surgiendo en Cuba, rechazando la idea de una solución mágica para derrocar al régimen.

“Quien quiera libertad tiene que eliminar la teoría de la ‘varita mágica’, el régimen no cae por sí solo, aunque sea muy débil. Se cae cuando lo derriban”, dijo.

Por su parte, Sylvia Iriondo, de la ARC, recordó la traición durante la invasión de Bahía de Cochinos, al tiempo que reafirmó la resiliencia del exilio cubano y la importancia de unirse para lograr un cambio democrático.

Señaló que “hay que sumar y no restar a las iniciativas que conduzcan al paso definitivo para un verdadero cambio democrático, no criticarnos unos a otros. El momento es ahora».

Javier Larrondo, presidente de Defensor de Prisioneros, destacó la importancia de debilitar los pilares de poder del régimen, entre los que enumeró el control de la narrativa interna y externa, las relaciones internacionales, los ingresos ilegales y las fuerzas armadas. Todos tienen debilidades.

Prensa independiente y adoctrinamiento

Asimismo, Iliana Lavastida, directora del Diario Las Américas, y el periodista Mario Pentón abogaron por la relevancia de la prensa independiente y el apoyo a los cubanos tanto dentro como fuera de la Isla.

Lavastida destacó que el adoctrinamiento en Cuba llevó a división familiar, “condenados a la separación y al desarraigo”. Para Pentón, “el diario Granma (órgano oficial de difusión y propaganda de la dictadura cubana) se convirtió en una señora mayor que no puede soportar las noticias sabias.

Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento por la Democracia, se emocionó, expresó su orgullo por la fuerza de los pueblos oprimidos, instando a la unidad y la acción colectiva.

Sánchez comentó: “Me conmueve el orgullo de toda la fortuna que tenemos los cubanos, los bolivianos, los venezolanos, los nicaragüenses, pueblos oprimidos que no se rinden”.

El foro, en el que participaron otras personalidades, concluyó con un mensaje claro: la libertad de Cuba requiere una estrategia multifacética que incluya la educación, el apoyo internacional y la unión de todos los cubanos en busca del cambio democrático.

Quedó claro que la lucha por la libertad en Cuba sigue siendo un “desafío complejo” que requiere del esfuerzo conjunto de la comunidad internacional y de los propios cubanos, dentro y fuera de la isla.