Después de la celebración de Martín Fierro latín En 2023, los ecos de la controversia sobre la mala organización resuenan con fuerza. Este evento, impulsado por la Asociación de Periodistas de Radio y Televisión Argentina (APTRA), que se desarrolló en el Teatro Manuel Artime de Miami, Estados Unidos, se convirtió en el epicentro de polémicas que desataron una serie de descontentos y acusaciones.
La ceremonia, conducida por Pampita Ardohain y Pollo Álvarez, estuvo rodeada de expectación y glamour, con una gran presencia de celebridades argentinas. Sin embargo, situaciones desfavorables no tardaron en empañar la gala del Martín Fierro Latino. La cuenta X de “LAM”, el programa conducido por Ángel de Brito en América TV, se convirtió en el medio que reveló los escándalos que marcaron la noche que se vivió en Miami.
Según sus publicaciones, el evento fue un caos, destacando un incidente que involucró a Luis Ventura, quien se retiró al lobby porque casi un centenar de invitados estaban más interesados en la comida que en el evento.. El presidente de APTRA, molesto, habría ordenado apagar las luces o incluso expulsar a quienes no estuvieran atentos a lo que sucedía durante la entrega del Martín Fierro Latino.
Pero los problemas no terminaron ahí, ya que hace unas horas, en el programa de Ángel de Brito, Yanina Latorre arrojó luz sobre un posible escándalo mayor: la demanda que presentó la organización del Martín Fierro Latino. Según el panelista, hubo irregularidades en la gestión del evento en Miami. “Originalmente los derechos los adquirieron Oscar Posedente y María Castro en 15 mil dólares”, dijo el panelista de “LAM”.
Sin embargo, Diego Suárez tomó el control del evento, invitando sólo a sus amigos y descuidando a muchos otros invitados. Mucha gente se sintió despreciada por Diego Suárez. Fue un fiasco.
Suárez habló con “Chisme”
En conversación exclusiva con “Chisme”, Diego Suárez, organizador general de estos prestigiosos premios, brindó detalles sobre la próxima premiación que se realizará fuera de Argentina. El productor destacó la importancia de este paso hacia lo internacional, con una lista de invitados de lujo y una modalidad que se alejará de las tradicionales galas del Martín Fierro.
Sin embargo, la conversación también abordó un tema espinoso: el problema relacionado con las visas de trabajo para algunas celebridades. Ante las especulaciones y rumores sobre las dificultades de este trámite, el productor no negó la existencia de este problema: “No voy a ignorar que esto es una realidad para todos los que venimos a EE.UU. (…) Los conductores y las personas que vienen a trabajar bajo contrato deben tener su visa de trabajo. Esto se procesa una vez que se arreglan sus contratos para venir aquí.”.