Todo se originó cuando el director Héctor Godoy fue a un salón de clases porque había un problema con un calefactor. Allí encontró diferentes expresiones y dibujos en un pizarrón, lo que motivó su intervención con alumnos de sexto grado.
Al parecer, el encargado mencionó en términos callejeros el órgano genital masculino que alguien había dibujado en la pizarra.
El episodio generó preguntas de un grupo de madres estudiantes y decenas de comentarios en las redes sociales en apoyo a la directora.
Ese apoyo a Godoy de manera virtual se cristalizó ayer en la calle, frente al centro educativo José Ingenieros, cuando un nutrido grupo se movilizó en su apoyo, con diversas muestras de cariño y agradecimiento.
Madres, padres, docentes, familiares de Godoy y algunos alumnos se dieron cita en la calle Santa Fe para visibilizar su acompañamiento al docente, quien está a seis meses de jubilarse.
Fue justo el día en que la inspectora María Cavalieri decidió destituirlo de su cargo, de manera provisional hasta que la Justicia se pronuncie sobre lo sucedido.
“Pedimos la reincorporación de nuestro querido director. Héctor, estamos contigo. Familia Seguín Balmaceda”, decía un cartel. «Defender a Héctor es defender la educación», decía una leyenda sobre una bandera argentina, que izaba en alto una mujer.
“Héctor representa a diario a los maestros maltratados en nuestro país. Justicia”, se indicaba desde otra pancarta.
Había muchos carteles pegados en las rejas de la escuela, en los que se pedía «Justicia para Héctor» y se brindaba apoyo.
un maestro hablo
Una docente que habló públicamente desde la calle mencionó que lo que está pasando es producto de “padres que no se adaptan a la realidad, y en lugar de educar a sus hijos, buscan culpar a los de afuera”.
«La educación comienza en casa», dijo, entre muchos aplausos.
“Había una situación netamente pedagógica en el ambiente del aula, donde Héctor hacía leer a los alumnos de sexto grado unos comentarios que habían rayado en la pizarra. Posteriormente, Héctor tuvo una reunión con algunos padres de familia, con seis de sesenta, en la que les explicó esta forma pedagógica que tiene que ver con la lógica del cuidado: cuidar al compañero, cuidar al docente y también cuidar a la institución. en cuanto al edificio. Posteriormente hubo una intervención de la Inspección y actualmente nos encontramos ante una decisión de la inspectora, quien se subroga en su cargo en la localidad de Córdoba, María Cavalieri, quien decide remover provisionalmente a Héctor hasta que la Justicia determine si en particular releyendo la la palabra verga es delito o no», explicó Pablo Maccarini, abogado de Godoy.
Maccarini estaba en la vereda de la escuela mientras se realizaba la movilización ayer a la hora de la siesta, y ahí fue abordado por El Diario.
“Juzgar los problemas educativos es complejo, es triste para los que creemos que la ciudad debe proteger a sus educadores y en especial a alguien de la talla de Héctor”, consideró.
Aseguró que “específicamente fue una persona soltera, una madre soltera” quien originó el reclamo. “Es el que sustenta la denuncia en la Inspección y una declaración judicial que dice específicamente, más allá de la tergiversación del hecho, que el director usó la palabra pito para releer un rasguño en la pizarra”. Calificó de «loca» la decisión del inspector, «porque depende de que la Justicia decida sobre una denuncia que en términos legales tampoco tiene fundamento».
“Héctor está lejos de dirigir la escuela, a la que entregó gran parte de su vida, y sucede al poco tiempo de jubilarse”, subrayó.
Al lugar también llegaron familiares del docente. Varios de ellos lloraron por lo sucedido.
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