Tras el estallido de violencia iniciado el 15 de abril en Sudán, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) prevé que el número de personas que pasarán hambre en la nación africana en los próximos meses aumentará entre 2 y 2,5 millones, situación que conducir a una mayor inseguridad alimentaria aguda para 19 millones de sudaneses, o el equivalente a dos quintas partes de la población.
La agencia de la ONU vaticinó este miércoles que las zonas más afectadas por la inseguridad alimentaria serían los estados de West Darfur, West Kordofan, Nilo Azul, Mar Rojo y North Darfur y advirtió que el precio de los alimentos básicos podría aumentar un 25% en los próximos tres a seis meses.
La situación podría empeorar y los alimentos encarecerse aún más si los agricultores no tienen acceso a sus campos entre mayo y julio, cuando planean comenzar a sembrar alimentos básicos.
Ampliar el alcance de la ayuda humanitaria
Luego de la interrupción parcial de operaciones por condiciones de inseguridad y violencia, el Programa retomó sus actividades recientemente y la semana pasada ya ha distribuido alimentos esenciales a más de 35.000 personas.
Las operaciones buscan asistir a un total de 384.000 personas, e incluyen familias que han huido recientemente del conflicto, refugiados y desplazados internos que ya tenían este estatus, y comunidades vulnerables que los acogen en los estados de Gedaref, Gezira, Kassala y Nilo Blanco. .
Los Servicios Aéreos Humanitarios de las Naciones Unidas (UNHAS), administrados por el PMA, están iniciando conexiones aéreas regulares entre la ciudad sudanesa de Port Sudan y la capital etíope de Addis Abeba, lo que facilitará el transporte seguro de los trabajadores humanitarios de primera línea y la ayuda esencial.
En los próximos meses, la agencia de la ONU ampliará el alcance de la ayuda de emergencia apoyando a 4,9 millones de personas vulnerables en áreas donde la situación de seguridad lo permita, además de prevenir y tratar la desnutrición aguda moderada de 600.000 niños. cinco años y mujeres embarazadas y lactantes.
Antes del estallido del conflicto, las operaciones del PMA ya sufrían un déficit de financiación de más de 300 millones de dólares. El aumento de las hostilidades provocará un aumento de las necesidades presupuestarias.
Apoyo en países vecinos
El Programa proporcionó ayuda alimentaria de emergencia a los recién llegados a Chad, ayudando hasta ahora a más de 16.000 personas. Sin embargo, la respuesta humanitaria está en peligro debido al bajo nivel de financiación de las operaciones en la nación africana.
Más de 40.000 personas ya cruzaron a Sudán del Sur, donde el Programa proporciona comidas diarias en los centros de tránsito, así como exámenes nutricionales para niños y mujeres embarazadas o lactantes.
En Egipto, donde hay la mayor afluencia de refugiados, el PMA trabaja con el Gobierno y la Media Luna Roja Egipcia. Este último estamento repartió la entrega de más de 20 toneladas métricas de alimentos fortificados en los dos puntos de entrada al país.
Unas 9.700 personas cruzaron la frontera entre Sudán y la República Centroafricana, llegando a la localidad de Amdafock, en la prefectura de Vakaga. El PMA tiene previsto ayudar a unas 25.000 personas que llegarán en los próximos días.
Enormes necesidades y escasos recursos.
Mientras tanto, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, compartió en Twitter que más de 150.000 personas ya han huido de Sudán, tanto ciudadanos sudaneses como refugiados acogidos en el país.
«Las necesidades son enormes. Los recursos son escasos. ¡Se necesita ayuda, con urgencia!» Grandi escribió en su cuenta de la famosa red social.
En una semana se duplica el número de desplazados
Por su parte, el portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Paul Dillon, declaró este martes en rueda de prensa en Ginebra que el número de desplazados internos por los combates asciende a más de 700.000 personas.
«El martes pasado, el número era de 340.000. Y, naturalmente, antes de los combates, se estimaba que había 3,7 millones de desplazados internos en Sudán», agregó.
entregas bloqueadas
Dillon explicó que esta agencia de la ONU “tiene existencias de artículos no alimentarios en seis almacenes a lo largo del país”, reservas que aún no han sido distribuidas a las personas que más las necesitan.
«Los combates deben terminar y se debe permitir que los trabajadores humanitarios reanuden su trabajo, brindando asistencia a los más necesitados antes de que la situación se salga aún más de control», dijo el portavoz.
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