Marcela Kloosterboer Estuvo visitando «Noche al Dente», el programa de Fernando Dente en América TV, donde abrió su corazón para hablar de la maternidad. Además, hizo una revelación totalmente inesperada sobre sus dos hijos, fruto de su amor con Fernando Sieling.
En una nota anterior que había proporcionado a los medios, Marcela Kloosterboer había confesado una frase contundente: «Pierdo mucho la paciencia con mis hijos». Al ser consultada sobre este reality, la actriz de “Un plan perfecto” reafirmó sus dichos y lanzó: “Le mando un beso a mis hermosos hijos, pelean sin parar todo el dia«.
Fue entonces cuando Marcela Kloosterboer quiso contar una anécdota: «El otro día estábamos en la playa, en Cariló, en Semana Santa y le digo a un amigo que estaba con nosotros con su hijo en brazos: ‘ay, qué lindo que va a tener un ratito'». hermano'». Y continuó: «Ellos (Juana y Otto) estaban armando un castillo, dos minutos después, piña«.
«Falso, muchachos. Tienen buenos momentos. Son lo más», dijo mientras mostraban tiernas fotos de sus hijos abrazándose en la pantalla. Sin embargo, reconoció que todos los días le enseñan mucho y de esta manera puede mostrar la mejor versión de sí misma, que siempre la sorprende.
Las confesiones de Marcela Kloosterboer
La diosa argentina comentó que aunque le cuesta no ser dura consigo misma, pues está en constante autocrítica, ahora trata de dejar esa mirada atrás y buscar su mejor versión: “Trato de ser un poco más amable. a mí mismo.» Además, reconoció que los niños tienen mucho que ver en este constante aprendizaje.
“Los niños son grandes maestros, porque te cuentan cosas. Juana me dice por ahí: ‘Mamá, no todo tiene que ser perfecto’. También es una gran oportunidad para mí de buscar el cambio y la transformación. Conocerse también a través de su mirada, porque te lo demuestran todo el tiempo y siempre tratan de ser más amables contigo”, dijo.
Por otro lado, confesó que la maternidad no era algo con lo que siempre había soñado, pero con el paso del tiempo nació ese deseo en su corazón: “Nunca fui muy ‘Susanita’ ni fanática de los niños, pero llegó un momento que dije ‘pues sí'».
Finalmente, aseguró que estaba segura de que quería tener dos hijos y no solo uno: «Tengo un vínculo muy lindo con mi hermano, pasamos muchas cosas juntos, entonces para mí era sí o sí que tuvieran». Es proporcional lo mal que se llevan con lo bien que se van a llevar, porque así de incondicional va a ser ese amor con las barbaridades que se digan”.
