mayo 3, 2024

la industria de la moda no está exenta de las perturbaciones que tecnología huellas en los procesos sociales. Por tanto, la incorporación de Inteligencia artificial, el Internet de las Cosas (IoT) y la realidad aumentada, forman parte de un procedimiento que va más allá de hacer una camiseta o un pantalón de una forma más rentable, sostenible y atractiva; pero que destacan pinceladas de una industria que se encuentra en plena transformación.

¿Qué papel juega una camisa o un pantalón en la vida de las personas? En primera instancia, seguramente, las ganas de vestirse, pero hay más; A la hora de elegir entre prendas, estilos, precios, texturas y formatos, hay un sinfín de elementos socioculturales que confluyen y determinan -incluso inconscientemente- la elección más adecuada. Pero, ¿podría la tecnología jugar un papel?

A la hora de las definiciones, Nathalie Puexdirectora del Área de Antropología de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y fundadora del Laboratorio de Antropología Aplicada (LAB AA), precisó que “la moda no es solo estética visual” y la caracterizó como “una experiencia colectiva, social y cultural».

¿Y la Inteligencia Artificial? “La irrupción de la inteligencia artificial está de moda (…) pero es algo que empezó con la pandemia”, dijo Puex al recordar los días de la emergencia sanitaria por el Covid-19 -que acaba de terminar formalmente-, en los que se era imposible Visitar una tienda para comprar ropa era cuando las marcas debían incorporar estrategias web para fidelizar a los clientes y brindarles alternativas de consumo.

Estética visual, el proceso cultural y las disrupciones.

Pero además de la incorporación de canales de venta virtuales, Puex se refirió a la incorporación de bots de respuesta automatizada y soluciones de Inteligencia Artificial (no generativo) que ofrecía interacciones para, por ejemplo, asesorar a los clientes. Luego llegó el turno de la realidad aumentada, «que no es exactamente el metaverso», dijo Puex sobre las pantallas 3D que las empresas en varias partes del mundo instalaron para que sus clientes probaran estilos de ropa virtualmente.

Incluso, durante la semana de la moda de Buenos Aires (Bafweek 2023), se realizó un desfile de moda virtual inmerso en la red social de realidad aumentada Spatial y se presentó el marketplace. metamoda desde donde el público podía probar la colección desde su celular.

«Me parece interesante, aunque es un uso muy limitado y muy sencillo de la Inteligencia Artificial que no requiere demasiada tecnología aparte de la pequeña inversión necesaria para tener estos dispositivos a disposición del cliente.«, admitió el antropólogo.

“Pero empiezan a surgir otros temas en la industria”, dijo Puex, quien destacó que hay apuestas que van más allá de la estética, como la necesidad de calcular el impacto ambiental, “que es un desafío y se ha puesto en la agenda de la industria».

Nathalie Puex, antropóloga de FLACSO.

Nathalie Puex, antropóloga de FLACSO.

El reto de la sostenibilidad

Al pensar en la industria de la moda y su impacto en la naturaleza, es difícil no recordar que en el desierto de Atacama en Chile, la maravilla natural es sepultada diariamente por un vertedero clandestino de ropa usada y en desuso proveniente de diferentes latitudes internacionales, producto de la famosa moda rapida.

La sola imagen es impactante, sobre todo porque se trata de prendas que tardarán 200 años en degradarse y que, según datos del Servicio Nacional de Aduanas de Chile citados por Greenpeace, el ingreso de este tipo de basura a la zona de Alto Hospicio, a 1.800 km de distancia al norte de Santiago, fue de 46.287 toneladas en 2021; pero cuyo crecimiento interanual supera el 50 por ciento desde 2018.

«Siempre existe esta idea de la conspiración social de los moda rapida contra la sociedad y, en realidad, no le conviene a la industria perderlo todo, porque todo tiene un costo“, explicó Puex y repasó casos de conocidas colecciones que salen al mercado sin haber tenido suerte, donde la tecnología tiene mucho que aportar: desde optimizar sus procesos, facilitando la producción de prendas que realmente se usan, hasta promover circuitos circulares de consumo. , como los denominados «de paso», que añade vidas útiles a las prendas.

Y aunque la industria empieza a tender estrategias de sostenibilidadPuex se mostró escéptico ya que, sobre todo, en Argentina falta acompañamiento. La antropóloga valoró incluso que, aunque hay una mayor exigencia a las empresas para que empiecen a justificar qué hacen con sus residuos y, sobre todo, cómo van a producir, las iniciativas acaban siendo aisladas.

Oficios, influencers y la demanda de nuevos profesionales

Alrededor de Inteligencia artificial y la creatividad hay muchos otros debates abiertos, como los vinculados a la patentabilidad de la propiedad intelectual y, en este sentido, Puex también se distanció al caracterizar la…

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