La alegría de poder ampliar la casa

Fotos: María Victoria Araújo

Las familias numerosas con ingresos que las sitúan lejos de poder ampliar sus viviendas, y que viven hacinadas, retirarán esta semana materiales de construcción para poder ampliar sus viviendas, a través de un plan del Estado Nacional -gestionado por el municipio- que alcanza en esta primera instancia a 32 familias, y que luego se ampliará a poco más de un centenar.

Nicolás Centeno y Débora Farías tienen cuatro hijos, de 1 año y medio, 3, 11 y 13 años, y viven en “una casita pequeña, que ampliaremos con un cuarto”, según dijeron a El Diario.

«Actualmente, solo tenemos una habitación para todos», dijeron.

Viven en el barrio Los Olmos, él es albañil, ella cría a sus hijos y es ama de casa, y básicamente cuidan a la pequeña de 3 años, que tiene parálisis cerebral.

“El trabajo está algo flojo”, dijo Nicolás.

Alejandra Cena, Kevin Oliveira y la hija de la pareja, Fiama, de 3 años y medio, residen en Belgrano, en un terreno de la madre de Alejandra, detrás de su casa.

Dijeron que pararon la construcción por los altos costos, que les impidieron continuar, y ahora están felices de poder seguir adelante.

Haremos el baño. Tenemos un baño y ahí se detuvo, queremos terminarlo. Esta ayuda es muy útil, estamos felices, muy felices y agradecidos”, dijo Kevin a este periódico.

Trabaja de forma independiente como seguridad en eventos, actividad que “mueve mucho”. Ella es una ama de casa.

«Sin esta ayuda se vuelve bastante complicado», dijeron. “Vimos precios y no llegamos”, remarcó.

Jésica Allende, de 33 años, vive con sus tres hijas, de 12, 8 y 4 años, en el Felipe Botta.

“Le levanté algunas paredes, me falta el techo y el baño”, explicó a la consulta.

“Esto es muy bueno, me alegra, me ayuda”, dijo la vendedora de panes caseros, que los vende en la calle desde hace 3 años y medio, y que es su principal ingreso junto con la Asignación Universal por Hijo. (AUH) .

Quiere tener un trabajo fijo, porque con el pan «hay días que se vende bien, días que no», y además no puede salir cuando llueve. Su única movilidad es una motocicleta.

Son testimonios que reflejan la enorme importancia de que el Estado ayude a las familias que se encuentran en peores condiciones habitacionales, para que puedan ampliar sus residencias. Cambia radicalmente sus vidas.

Es la primera vez que se conceden este tipo de ayudas en la administración. Seguirán con unas 80 familias más