Se ha pasado de unas 30.000 entradas diarias de marroquíes por el paso fronterizo antes del cierre de fronteras en 2020 a unas 3.000 en Ceuta y 5.500 en Melilla ahora, según informan ambas Delegaciones del Gobierno a este periódico.
Mientras que Marruecos y España se preparan para llevar sus relaciones bilaterales en la cumbre de Rabat “a un nivel sin precedentes”en palabras del rey Mohamed VI, sobre el terreno Las fronteras de Ceuta y Melilla se endurecenmenos permeable para los ciudadanos marroquíes, según explicó a este periódico los Gobiernos de estas ciudades autónomas y ambas Delegaciones de Gobierno. Antes del cierre por covid en febrero de 2020, había unos 30.000 pasos diarios de personas y 10.000 vehículos de Marruecos a Ceuta. Ahora, y tras una orden del Gobierno que endurece las condiciones para entrar, la cifra es diez veces menor, unos 3.000 pasos diarios, todo ello según las estimaciones facilitadas a este periódico por el Ayuntamiento y corroboradas por fuentes de la Delegación del Gobierno. Normalmente eran marroquíes de la vecina provincia de Tetuán que iban a trabajar a la Ciudad Autónoma en el servicio doméstico, la construcción o la hostelería. En Melilla, la reducción ha sido similar. Si antes de 2020 entraban «entre 30.000 y 35.000 personas y 4.000 vehículos diarios de media», ahora la cifra ha descendido a 5.500 personas entrando al día y 1.500 vehículos de media, informa la Delegación del Gobierno en Melilla. Los españoles pueden entrar en Marruecos presentando y sellando su pasaporte.
Cuando España entró en el Espacio Schengen de libre circulación de la Unión Europea, Pidió una excepción para favorecer la economía de Ceuta y Melilla. Los residentes de las provincias vecinas de Tetuán en Ceuta y Nador en Melilla podían pasar los controles solo con pasaporte para trabajar, pero sin pernoctar. Existía otro control, ya en el puerto, para impedir que entraran en la Península sin visado Schengen y, desde allí, al resto de Europa. desde marruecos abrió las fronteras de nuevo en mayo (parte del acercamiento tras el reconocimiento por parte de Pedro Sánchez del plan autonómico del reino alauita para el Sáhara Occidental ocupado) todo ha cambiado. Es mucho más restrictivo. El Gobierno ha estado emitiendo órdenes temporales que endurecían los requisitos de entrada y, de facto, eliminaban la excepción Schengen para los residentes de Tetuán y Nador. Ahora están obligados a tener un visado que les permita entrar en el espacio común europeo, o un permiso especial de trabajo en Ceuta y Melilla, lo que les obliga a volver a casa a dormir. Esa decisión ha sido prorrogada sine die con resolución de la Secretaría de Estado de Seguridad (del BOE de 13 de diciembre). En su Se ha acordado «mantener el cierre parcial temporal de puestos terrestres autorizados para entrar y salir de España por las ciudades de Ceuta y Melilla”. Y este cierre parcial se mantendrá “hasta que entre en vigor un nuevo régimen de tráfico transfronterizo y se adapten las instalaciones de los puestos fronterizos a la nueva regulación”. Es decir: hasta que España y Marruecos acuerden cómo serán las normas para la el tránsito de personas y mercancías será en la frontera común, algo que se espera se anuncie en el Reunión de Alto Nivel entre los Gobiernos de Marruecos y España este miércoles y jueves en Rabat, al que asistirán Pedro Sánchez y el presidente del Gobierno marroquí, Aziz Akhannouch, y una decena de ministros. Entre ellos, los involucrados en temas fronterizos: los de Gobernación, Relaciones Exteriores y Hacienda.
«De momento no tenemos información oficial ni extraoficial de cómo será el paso de la frontera, y ni el Ministerio del Interior ni la Delegación del Gobierno nos han comunicado nada», dijo a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. Eduardo de Castro, Presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla. “Ahora el paso de la gente ya no es como antes: están controlando quién entra,…
