Las autoridades griegas cerraron temporalmente la Acrópolis de Atenas el viernes porque se esperaba que las temperaturas alcanzaran los 40 grados centígrados y algunos turistas experimentaron desmayos.
Voluntarios, médicos y trabajadores de la salud de la Cruz Roja Helénica ofrecieron agua y primeros auxilios a los turistas que esperaban visitar el antiguo monumento, que estuvo cerrado desde el mediodía hasta las 5 de la tarde hora local.
La organización informó que algunos de los visitantes del sitio experimentaron signos de deshidratación y desmayos debido a las altas temperaturas.
«Tuvimos muchos incidentes hoy de personas que se desmayaron o se sintieron mareadas porque no se cuidaron muy bien», dijo a Euronews Stella Katsoulopoulou, voluntaria de la Cruz Roja.
“No usaban sombreros, lo cual es muy importante en estos días. No debemos salir a la calle sin sombrero y, por supuesto, debemos beber muchos jugos y agua”.
La Acrópolis es uno de los monumentos más populares de Grecia y unas 14.000 personas la visitaron solo en mayo. Algunas de las personas que pudieron ver el sitio le dijeron a Euronews que el calor valió la pena la visita.
«Acabamos de volar desde Sidney, Australia, nuestra visita de hoy fue increíble, fue increíble, aunque hizo mucho calor… pero increíble», dijo una mujer fuera de la Acrópolis. “Días como estos en Australia son bastante normales en verano y solo estamos aquí una vez en la vida”.
Otro turista le dijo a Euronews: “Soy de Tennessee de los Estados Unidos, y fue hermoso, increíble.
“Hacía un calor espantoso, pero valía la pena la vista”.
Tras el cierre temporal, muchos de los turistas encontraron refugio en los restaurantes cercanos, en busca de una bebida para refrescarse y algo para comer.
Y aunque muchas empresas permitieron que los empleados trabajaran desde casa el viernes, algunos trabajadores del bullicioso sector turístico del país tuvieron que hacer frente al calor.
«Hoy es el día más caluroso hasta ahora, es muy difícil trabajar en estas circunstancias», dijo a Euronews Nikos Fallias, uno de esos trabajadores.
“Tratamos de beber mucha agua y tomar descansos como lo hacen los atletas”.
Otras partes de Europa también están experimentando temperaturas altísimas, ya que se esperaba que 12 de las 17 regiones de España alcanzaran los 40 grados centígrados el viernes.
