Las revelaciones de corina larsen sobre su romance con el rey Juan Carlos han acaparado, en un principio, los titulares de los medios españoles, ávidos de más morbo en torno a la imagen desfigurada del hombre que hizo lo que quiso durante los 40 años que reinó en España.
Los datos comenzaron a fluir en dosis homeopáticas en el podcast titulado “Corinna and the King”, que tan buena acogida tuvo en sus primeros capítulos.
Pero con el paso de las publicaciones, estas joyas de la intimidad de la pareja comenzaron a ser cuestionadas, y no precisamente por la presunta honorabilidad del Rey Juan Carlos. No mucho menos.
Entre la fábula y la realidad se perfilaba corina larsenque en su última entrega, titulada «Tercazo», pretendía justificar ante la Corte británica su reclamación contra el rey Juan Carlos y los 65 millones de euros que se embolsó como regalo y que luego se negó a devolver.
Además de confirmar un compromiso con el director de orquesta italiano Alvise Casellati, afincado en Nueva York, la empresaria alemana habló de espionaje contra él y sus bienes, incluido el enorme anillo que le regaló el rey emérito, que estaría valorado en casi un millón de euros. .
Otro de los trofeos que corina larsen estaba orgulloso es que con parte del dinero que le dio el rey Juan Carlos compró una mansión de 80 hectáreas en Chyknell Hall, en Reino Unido y que durante un viaje, acompañando al emérito, el rey alauita Mohamed VI de Marruecos le dio él un pedazo de tierra.
Finalmente, contó que contrató a exagentes del FBI para que se sometieran a un proceso de interrogatorio y que a raíz de ello consideró que fue “una experiencia bastante aterradora, la de enfrentarse a cinco agentes del FBI y numerosos representantes del Departamento de Justicia de Estados Unidos en Zoom y en persona. Algunos de ellos los ves y otros no. Tienes al policía bueno, tienes al policía malo, tienes todo este elenco de personajes tratando de hacerte tropezar… Como nosotros A medida que avanzaba, me sentí muy cómodo hablando porque efectivamente llegamos a lo contrario de las falsas impresiones. Los hechos son mis mejores amigos, los hechos siempre han sido mis amigos.
Ahora, la aristócrata tiene un nuevo trabajo y explicó que “gira en torno a la resolución de irregularidades financieras y delitos relacionados con sanciones. Inesperadamente, estoy trabajando en un campo que me vi obligado a enfrentar después de esta terrible experiencia de acoso. Estoy ocupado tantas horas del día como puedo”.