la figura de Ángela Aguilar (19) es tan popular como controversial en México. Tanto es así que la menor de la Dinastía Aguilar, una generación que comenzó con sus abuelos y continuó -y aún hoy continúa- con su padre Pepe Aguilar, es blanco de todo tipo de críticas en el país donde brilla con su género. la regional mexicana.
Desde hace unos meses, a la joven se le ha cuestionado que -supuestamente- no haya nacido en México, algo que en su momento sufrió el mismísimo Luis Miguel. Y, si a partir de comparaciones entre Ángela Aguilar y el “Sol de México” de que hablamos, el más reciente tiene que ver con la lista de requisitos que la “Princesa del Regional Mexicano” solicita cada vez que llega a un lugar para una de sus presentaciones.
Las exquisitas y caprichosas exigencias de Ángela Aguilar para tocar en vivo
En las últimas semanas, la popularidad de Ángela Aguilar ha comenzado a mostrar una tendencia a la baja. Tanto es así que en algunas de sus últimas presentaciones no logró vender todas las entradas e incluso ha tenido que suspender fechas ya programadas y anunciadas.
Y, dentro del ambiente artístico mexicano -especialmente aquellos sectores que no sienten mucha simpatía por Ángela Aguilar-, se dice que esta pérdida de popularidad tiene que ver con la personalidad pedante, altanera y arrogante que tiene la hija de pepe aguilar. De hecho, hay quienes sostienen que padre e hija son idénticos en ciertos tratos descorteses, y no han faltado las comparaciones con Luis Miguelel rey de los caprichosos exige acceder a hacer presentaciones.
Entre las demandas que ambos Ángela Aguilar Como su padre Pepe tiene y pone como condiciones para hacer una presentación, destacan 3 que son muy irrisorias. Según informó el periodista Álex Zúñiga, los Aguilar exigen no tener contacto con nadie del exterior. Ya sea en el vestuario o en el hotel, nadie puede hablar con ellos (este sería el segundo requisito). La tercera, en tanto, es que solo sus guardaespaldas pueden tocar y manipular sus maletas, así como encargarse de acomodar las pertenencias de Ángela Aguilar y su padre