La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha alertado este miércoles de un brote a gran escala de langosta marroquí en ocho provincias del norte y noreste de Afganistán, la zona de producción y reserva de trigo más importante del país. .
«Los informes sobre el brote de langosta marroquí en esta zona de Afganistán son motivo de gran preocupación. La langosta marroquí se alimenta de más de 150 especies de plantas, incluidos cultivos arbóreos, pastos y 50 cultivos alimentarios, todos los cuales crecen en Afganistán. Representa un enorme amenaza para los campesinos, las comunidades y el país entero”, aseguró el representante de la Organización en Afganistán.
«Los dos últimos grandes brotes, hace 20 y 40 años, le costaron a Afganistán entre el 8 y el 25 % de su producción anual total de trigo. Las previsiones de cosecha para este año son las mejores que hemos visto en los últimos tres años, pero este brote amenaza con destruir todas estas ganancias recientes y empeorar drásticamente la situación de inseguridad alimentaria más adelante este año y el próximo», agregó Richard Trenchard.
La langosta marroquí es una de las plagas vegetales más dañinas para la economía en todo el mundo. Un brote completo este año podría causar pérdidas de cultivos que oscilarían entre 700.000 y 1,2 millones de toneladas métricas de trigo, hasta una cuarta parte de la cosecha total anual. Esto se traduce en pérdidas económicas de entre 280 y 480 millones de dólares, según precios vigentes en el país.
perfectas condiciones
Las regiones del norte y noreste de Afganistán son propensas a los brotes de langostas marroquíes. Este año se han dado las condiciones «perfectas» para que uno tenga lugar: Sequía, pastoreo excesivo, control muy limitado de langostas y la cantidad justa de lluvia en marzo y abril para las langostas (aproximadamente 100 mm). Estas condiciones crearon el entorno ideal para que eclosionaran y pulularan.
En estas áreas de Afganistán, la langosta marroquí pone huevos entre mayo y junio, dependiendo de las condiciones ambientales, en áreas montañosas y cubiertas de hierba. Las langostas jóvenes eclosionan al año siguiente, a fines de marzo, y comienzan a alimentarse de los pastos circundantes. Este año, la eclosión comenzó antes de lo habitual.
«La alarma sonó tarde, pero la FAO, sus ONG asociadas, las comunidades y las autoridades locales se pusieron en acción de inmediato», dijo Trenchard. «Los suministros de productos químicos eran escasos en todo el país, por lo que nos vimos obligados a centrarnos en los métodos tradicionales de lucha mecánica para reducir el impacto del brote«.
El mandatario explicó que miles de personas en las comunidades de las provincias afectadas han estado trabajando día y noche para eliminar las langostas antes de que se conviertan en adultas y puedan volar y formar enjambres.
«Hemos utilizado nuestra metodología de dinero por trabajo para poner dinero en los bolsillos de los agricultores en mayor riesgo, mientras aceleramos la lucha mecánica en las comunidades de las regiones del norte y noreste. También hemos visto una respuesta fuerte y rápida y alentadora de Ministerio de Agricultura, Riego y Ganadería, aunque su capacidad de respuesta está muy limitada por la falta de recursosagregó Trenchard.
Langostas marroquíes son arrojadas a un hoyo durante un control mecánico en Baghlan, Afganistán.
Amenaza para la seguridad alimentaria en Afganistán… y más allá
Normalmente, en estos brotes, tras diezmar los pastos, grandes bandas de langostas y enjambres de adultos se desplazan hacia las zonas de cultivo y comen trigo de secano y de regadío y otros cultivos. No hay un solo cultivo que esté a salvo del daño de la langosta marroquí.
Si la población de langostas marroquíes no se trata, su número podría multiplicarse por 100 en el próximo año, creando problemas aún mayores para la agricultura y la seguridad alimentaria de Afganistán y sus vecinos.
«Los métodos de control químico son mucho más efectivos que el control mecánico. Afganistán solía tener un sistema de control de langostas muy fuerte. Pero en los últimos dos años ha sido muy erosionado. En este punto, todo lo que podemos esperar es que los métodos de control mecánico reduzcan el impacto global de los enjambres de langostas. Pero debemos comenzar ahora para evitar brotes aún mayores en 2024, una amenaza muy real en el futuro”, dijo el representante.
Para responder a esta amenaza, la Organización solicita urgentemente fondos para financiar medidas de control mecánico y químico, así como estudios de campo para monitorear y localizar los criaderos de langostas.
