- Un McDonald’s de la ciudad de Liverpool ha prohibido a los menores de 18 años comer allí a partir de las 17.00 horas sin un adulto.
- Un portavoz dijo que el personal había sido objeto de «abuso verbal y físico».
- «Tenemos una política de tolerancia cero cuando se trata de delitos y conductas antisociales», agregaron.
Un restaurante McDonald’s de la ciudad inglesa de Liverpool ha prohibido a los menores de 18 años comer allí después de las 17.00 horas sin un adulto.
Un portavoz del gigante de las hamburguesas le dijo a Insider que la prohibición temporal se introdujo después de que el personal del restaurante del centro de la ciudad, que está abierto las 24 horas, hubiera sido objeto de «abuso verbal y físico».
Un cliente le dijo a The Liverpool Echo que vio a un guardia de seguridad decirle a alguien que no podía dejar entrar a grupos de adolescentes sin un adulto según la nueva política de la compañía.
«En las últimas semanas, hemos visto un aumento en el número de incidentes de comportamiento antisocial en el área con nuestra gente sujeta a abusos verbales y físicos», dijo el portavoz a Insider.
«Tenemos una política de tolerancia cero en lo que respecta a la delincuencia y el comportamiento antisocial, y hemos restringido temporalmente el acceso a los restaurantes a los menores de 18 años a partir de las 17:00 horas».
«Esta decisión no se tomó a la ligera y estamos trabajando en estrecha colaboración con la policía para encontrar una solución y ayudar a reducir estos incidentes», agregó el portavoz.
Otros dos restaurantes McDonald’s abiertos las 24 horas, uno a cuatro minutos a pie y el otro a 10 minutos a pie, no parecen haber introducido la misma política.
Prohibir el ingreso de niños y adolescentes no acompañados a los restaurantes no es nada nuevo. En septiembre de 2021, un restaurante de hamburguesas de California prohibió la visita de clientes menores de 18 años a menos que estuvieran acompañados por un adulto, diciendo que algunos habían fumado marihuana en el baño, robado refrescos del refrigerador y destrozado la exhibición de Halloween de un vecino.
Algunos trabajadores de la hostelería dicen que los clientes se han vuelto más groseros desde que comenzó la pandemia, con enfrentamientos por las políticas de COVID-19 como las máscaras y el distanciamiento social, un servicio más lento en medio de la escasez de mano de obra y el aumento de los precios debido a la inflación.
