Los cambios en el gobierno nacional trajeron nombres (y hombres) para calmar las cosas en el sector agropecuario y también en la agroindustria. Desde la llegada de Sergio Massa, quien prácticamente concentra todo el poder tras la eliminación de los ministerios (Producción y Agricultura), hay muchos escépticos sobre lo que vendrá.
Anoche, en el aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario, Ecos365 logró conversar con varios empresarios y líderes del sector para conocer sus percepciones sobre Juan José Bahillo, el nuevo Secretario de Agricultura quien ya ha tenido reuniones con la Mesa de Enlace y algunos referentes del Consejo Agroindustrial.
Todos coinciden en la necesidad de una «tregua» al menos por lo que resta de mes para que las partes puedan seguir «conociéndose». Los reclamos son latentes y firmes, pero ante los recientes cambios de Gobierno, empresarios y dirigentes se muestran cautelosos ante la encrucijada.
Pero, una vez superada esta etapa de conocimiento, si no hay una señal concreta y firme, hay posibilidades de que alguien se encargue de patear el tablero. Es más probable que sea la Mesa de Enlace, teniendo en cuenta que de antemano el propio Bahillo ya anticipó que no se tocarán puntos clave que planteó el dirigente agropecuario: liberar totalmente las exportaciones de carne, quitar las cuotas de equilibrio a los cereales y reducir paulatina o totalmente retenciones. Precisamente, en el recinto del BCR, algunos productores que participan en entidades así lo informaron a este medio.
Del lado de la agroindustria, la paciencia es mayor. De hecho, esta semana el secretario de Agricultura estuvo ante la Comisión de Agricultura y Ganadería por el proyecto de ley que en su momento promovió el Consejo Federal Agroindustrial, que sufre cambios importantes por parte del Ejecutivo. Todo el sector espera pronto su tratamiento en el Congreso y allí, quizás, la posición de gran parte del sector encuentre una explicación.
“No tiene mucho margen y probablemente le hagan la plancha hasta fin de año”, fue uno de los comentarios que se escuchó en el BCR al analizar la figura de Bahillo. Ahí quizás esté el quid de la cuestión. Se sabe que el entrerriano proviene del sector lácteo y conoce a la perfección las necesidades de los productores, pero la gran duda es saber cuánto se puede avanzar para solucionar los problemas. Ya con buenas intenciones no basta.
