mujer financiera es una startup que tiene como objetivo «contribuir a la inclusión financiera de las mujeres y ayudarlas a ahorrar e invertir», según dijo su fundadora, Sabrina Castelli, en una entrevista para Minuto Argentina.
Sabrina, quien es contadora, es Licenciada en Administración de Empresas y cuenta con más de 12 años de experiencia en empresas multinacionales en las áreas de ventas y finanzas, inició este proyecto en el 2018, como un blog; luego, en 2019, su iniciativa se convirtió en un emprendimiento y, en 2020, mujer financiera se convirtió en una empresa de tecnología.
A través de mujer financieralas mujeres pueden aprender a empoderar sus finanzas, ahorrar e invertir, a través de cursos en línea y herramientas de gestión de finanzas personaleslo que, a su vez, les permite tomar mejores decisiones con el dinero y desarrollar mejores habilidades en su manejo.
Este proyecto nace de una historia personal de su fundadora, ya que, cuando ella tenía apenas nueve años, falleció su padre, quien estaba a cargo de todas las finanzas del hogar, lo que dejó a su madre a la deriva, ya que no trabajaba, No tenía una cuenta bancaria y no manejaba las finanzas.
Sumado a esto, la familia perdió, en una de las mayores crisis económicas de Argentina, el dinero que les habían otorgado para el seguro de vida del padre, que habían invertido en un banco en un producto de inversión.
Esta situación obligó a su madre a tener que enfrentarse a un universo completamente desconocido para ella en ese momento: el mundo de las finanzas, una realidad que viven muchas otras mujeres en América Latina.
Gracias a esta experiencia, el administrador aprendió “que la inclusión financiera no se trata solo de acceder a una cuenta bancaria, sino que realmente puedes tomar la mejor decisión para proteger tu dinero por tu familia y por tu bienestar”.
Si bien fue una situación muy difícil para Sabrina y toda su familia, esto la motivó a prepararse, incursionar en el mundo de las finanzas y entender cómo funcionaban, y fue precisamente esa preparación la que la llevó luego a ayudar a otras mujeres a empoderarse con sus finanzas.
Ello, ya que, como señala la abogada, en la región “hay una gran brecha de género en términos económicos”, ya que, por ejemplo, “solo el 51% de las mujeres tiene cuenta bancaria” y, de éstas, “solo una de cada 10 tiene ahorros en el sistema financiero”por lo que es claro que se necesita educación en este sentido.
Castelli destaca que las mujeres en particular enfrentan muchos desafíos en cuanto a la brecha financiera de género, como por ejemplo, a nivel de ingresos, ya que, en América Latina, esa brecha alcanza hoy el 17%. Esto significa que, frente a un hombre “que se desempeñe en la misma actividad o tenga el mismo nivel socioeconómico o educativo, la mujer generará menos ingresos a lo largo de su vida profesional”.
Asimismo, la abogada señala que, según un informe del Banco Mundial, “las mujeres tienden a tener un sesgo de falta de confianza en cuestiones de dinero”, es decir, tienden a pensar cosas como: “esto de los números no es para mí”. ”, en lo que también ha influido el mismo comportamiento de las sociedades, ya que la mujer siempre estuvo más inmersa en el cuidado del hogar y todas las tareas asociadas al mismo, que en el mundo laboral.
Adicionalmente, los sistemas educativos tampoco capacitan a las mujeres en esta área, por lo que, para esta población, el manejo del dinero es aún un tema desconocido y sobre el cual hay mucho que aprender. “La realidad es que si no sales a buscar ese conocimiento, ese conocimiento no te encuentra como puede en otras áreas”.
Ante ello, existe la necesidad de educar y, sobre todo, de empoderar a las mujeres en términos económicos, porque, además, cuando se producen crisis económicas como la actual, incluso en situaciones como la de la pandemia del coronavirus, las mujeres son las el primero en perder su trabajo y el que más tarda en recuperarlo, por lo que contar con las herramientas adecuadas que les permitan tener, por ejemplo, ahorros para afrontar este tipo de situaciones, es determinante.
Por eso, a través de la educación financiera, las mujeres que se suman a esta iniciativa aprenden a entender cómo funciona la economía, cómo están sus finanzas ya llevar un control de las mismas. Además, desarrollan hábitos financieros saludables como el ahorro y la inversión.
Lo hacen a través de cursos digitales, tanto de pago como gratuitos, que están disponibles tanto en el portal web de mujer financiera como en la aplicación que lleva el mismo nombre. Asimismo, la empresa brinda herramientas para que, de una manera fácil…