
los reina letiziala Princesa Leonor y el Infanta Sofía Comenzaron sus habituales vacaciones de verano con un velo de misterio, denominador común de esta temporada para la Familia Real. Todos los años aprovechan para hacer un viaje de incógnito y así descansar de los focos que les roban la intimidad.
Este año el viaje llega tras una semana en Palma de Mallorca con apenas tres apariciones públicas. Al comienzo de estos días, Doña Letizia sólo contará con la compañía de sus hijas, ya que El Rey Felipe aún tiene compromisos que cumplir.
El Rey Felipe deberá afrontar varios actos oficiales antes de partir de vacaciones privadas con su mujer e hijas. El sábado será el encargado de entregar los trofeos a los campeones de la regata de vela «40ª Copa del Rey-Maphre» y después poner rumbo a Colombia, donde asistirá a la toma de posesión del presidente Gustavo Petro.

El destino sigue manteniéndose en secreto, aunque en años anteriores han trascendido sus escapadas internacionales al Algarve portugués en 2012, la Costa Amalfitana en 2013, Italia en 2016, Croacia en 2017 o Grecia en 2018. Este año podría cobrar especial relevancia, si se tiene en cuenta que la familia real viene de casi dos años de enfrentar las restricciones de la pandemia del coronavirus, que imposibilitó muchos viajes.

El verano es una de las estaciones más importantes para la familia, una época del año en la que la familia Real al completo suele reunirse y pasar unos días de descanso y ocio en el Palacio de Marivent en Mallorca. Pero ya es costumbre que, tras su paso por Mallorca, la reina Letizia, el rey Felipe, el Princesa Leonor y el Infanta Sofía ir a un destino internacional, preferentemente paradisíaco y en total privacidad.